Bertolt Brecht
A los hombres del futuro
Vosotros, que surgiréis del marasmo en el que nosotros nos hemos
hundido, cuando habléis de vuestras debilidades, pensad también en los tiempos
sombríos de los que os habéis escapado. Cambiábamos de país como de zapatos a
través de las guerras de clases, y nos desesperábamos donde sólo había
injusticia y nadie se alzaba contra ella. Y sin embargo, sabíamos que también
el odio contra la bajeza desfigura la cara. También la ira contra la injusticia
pone ronca la voz. Desgraciadamente, nosotros, que queríamos preparar el camino
para la amabilidad no pudimos ser amables. Pero vosotros, cuando lleguen los
tiempos en que el hombre sea amigo del hombre, pensad en nosotros con
indulgencia.
Canción de una amada
1. Lo sé,
amada: ahora se me cae el pelo por mi vida salvaje,
y me tumbo en
las piedras. Me veis beber el aguardiente más
barato, y
camino desnudo al viento.
2. Pero hubo
un tiempo, amada, en que fui puro.
3. Tuve una
mujer que era más fuerte que yo, como la hierba
es más fuerte
que el toro: se vuelve a erguir.
4. Ella vio
que yo era malo, y me amó.
5. No preguntó
a dónde conducía el camino, que era su camino,
y quizás iba
hacia abajo. Cuando me dio su cuerpo, dijo:
esto es todo.
Y fue mi cuerpo.
6. Ahora ya no
está en ningún lado, desapareció como una
nube cuando ha
llovido, la abandoné y cayó, pues ése era su camino.
7. Pero de
noche, a veces, cuando me veis beber, veo su cara,
pálida en el
viento, fuerte y vuelta hacia mí, y me inclino ante
el viento.
Canción desde el acuario Salmo 5
He apurado la
copia hasta el fondo. Es decir, he sido seducido.
Era un niño, y
me amaron.
El mundo se
desesperaba, pues yo me mantenía puro. Ella
se revolcó por
el suelo ante mí, con miembros tiernos
y atrayente
trasero. Me mantuve firme.
Para calmarla,
cuando se excitó demasiado, yací con ella
y me volví
impuro.
El pecado me
satisfizo. La filosofía me ayudaba al amanecer,
cuando velaba.
Me convertí en lo que querían.
Miré largo
tiempo hacia arriba y pensé que el cielo estaba
triste sobre
mí. Pero veía que le era indiferente.
Él se amaba a
sí mismo.
Ahora hace
tiempo que me ahogué. Yazgo hinchado sobre
el fondo.
Los peces viven
dentro de mí. El mar se está agotando.
Hay muchas maneras de matar
Hay muchas
maneras de matar.
Pueden meterte
un cuchillo en el vientre.
Quitarte el
pan.
No curarte de
una enfermedad.
Meterte en una
mala vivienda.
Empujarte
hasta el suicidio.
Torturarte
hasta la muerte por medio del trabajo.
Llevarte a la
guerra, etc…
Sólo pocas de
estas cosas están prohibidas en nuestro Estado.
Bertolt Brecht fue un escritor alemán,
nacido en Augsburgo en el año 1898. Desde muy pequeño sintió afición por las
letras y publicó su primera obra cuyo título era "Baal" cuando tenía
20 años. Se dice que era un joven sumamente rebelde, opuesto a las ideas de la
casa paterna y dispuesto a vivir a su manera, dejándose atraer por lo
extravagante y viviendo intensamente cada segundo. Posiblemente esta forma de
vivir fue la responsable de que buscara en el arte la forma de entender la
realidad, viendo la literatura como una herramienta para conseguir un cambio en
su entorno. Durante la I Guerra Mundial y a causa de sus ideas marxistas,
Brecht fue obligado a exiliarse y vivió en Rusia, Estados Unidos, Suiza y
Finlandia. De esta época datan gran parte de sus obras, tales como
"Tambores en la noche", " Pero en la fría noche" y
"Galileo"; la mayoría de ellas, con un tono político rebelde y
social.
Brecht falleció en agosto de 1956 en Berlín y es recordado como uno de
los poetas y dramaturgos más influyentes del siglo XX, creador del teatro épico
y autor de una poesía cristalina y viva, gracias a la cual ha logrado
trascender y convertirse en una lectura indispensable para aquellos amantes del
teatro y sobre todo de la poesía social.
Biografía
tomada de: http://www.poemas-del-alma.com/bertolt-brecht.htm#ixzz2xCHWYzwQ
Comentarios